¡Sí, sí, sí! Queda muy poquito para preparar la mochila y despegar hacia un nuevo destino de viaje, con una compañía viajera que nunca hubiera imaginado. ¿Te lo cuento?
Nuevo destino de viaje, ¡a volar!

Me entusiasma contarte que la semana que viene a estas alturas estaré ¡rumbo a Cuba! ¡otra vez!
Justo 7 años después de mi primera visita a la isla vuelvo para conocerla a fondo con una compañía inesperada en un viaje que tampoco estaba previsto.
¿Qué quienes serán mis compañeras de viaje? Pues, agárrate que te lo digo; serán, mi suegra, y una tía y una prima políticas muy viajeras. ¿Qué te parece?
Cuatro generaciones (los 50, los 70, los 80 y los 90) en un viaje al más puro estilo de Travel me Softly: despacito, con tiempo suficiente y, como no, con la mochila a los hombros.
He viajado con amigos, amigas, en solitario, en grupo, en pareja, con desconocidos, con mi hermana, con mis padres... pero nunca pensé que me iría de viaje con mi suegra (sin que se venga mi chico claro), ¡y menos a Cuba! Así que esta va a ser una experiencia totalmente nueva en lo que a compañeros de viaje se refiere.
El objetivo es recorrer Cuba por libre, conociendo rincones más allá de las clásicas Habana y Varadero; alojándonos en casas particulares y disfrutando de la vitalidad de este país caribeño.
¿Cómo surge este viaje tan variopinto a Cuba?
Pues resulta que, sin premeditación, nos liamos la manta a la cabeza. Sole, mi suegra, llevaba muchos años queriendo ir a Cuba, pero a la de verdad, no al clásico pack de hoteles y resorts que generalmente ofrecen las agencias de viajes (y que están muy bien también, pero no es lo que buscaba).
La cosa es que, por una razón u otra, siempre que parecía que había alguna posibilidad de cumplir su sueño, al final se le torcían los planes. Ya con la guía de Cuba que le regalamos hace un par de años estudiada de pe a pa, este año volvió a pasar lo mismo. En febrero un plan de viaje a la isla con algunos amigos terminó por caerse dejándola aparentemente otro año más con las ganas de conocer este rincón del mundo.
Fue mi suegra quien nos propuso acompañarla, concretamente en plan mochilero. Y, ¿quién se puede resistir a eso?
Por la parte que me toca he querido volver a Cuba desde que la visité allá por 2010 y, precisamente, quería conocerla por libre, tal y como quiere Sole.
Las otras dos componentes de este variopinto grupo son Constan y Noe, madre e hija muy pero que muy viajeras (estoy segura de que algún día nos contarán sus viajes aquí porque no tienen desperdicio) y que siempre están dispuestas a apuntarse a un bombardeo.
De repente y sin darle vueltas, nuevo destino de viaje - ¡nos vamos a Cuba!

Plaza de la Catedral - La Habana
Si echas cuentas, como te contaba, en febrero se cayó el plan inicial de Sole para viajar a Cuba y, en menos de un mes estaremos volando al país. Concretamente comenzamos nuestra andanza el próximo jueves 23 de marzo.
¿Por qué esperar? No conviene posponer los sueños, ya que el momento ideal no llega, se crea; y la anfitriona de este grupo viajero ya había esperado demasiado para cumplir el suyo.
A pesar de haber sido algo súper espontáneo y con poca antelación los vuelos nos han salido bien de precio.
Te voy a recopilar una información de 10: itinerario, presupuesto, mejores rincones…uff, ¡vete preparándote! Y todo ello con la fortuna del antes y el después; me han dicho que no ha cambiado mucho en estos años, pero estoy deseando verlo con mis propios ojos.
En su día Cuba me cautivó hasta límites insospechados y estoy segurísima de que volverá a avivar esa llamita que se encendió hace 7 años.