A menudo en vuelos cortos, sobre todo si viajamos con compañías low cost, el equipaje de mano es todo lo que llevamos, por lo que nos las apañamos para meter todo lo que necesitamos para nuestro viaje.
Sin embargo, en vuelos largos, o simplemente cuando llevamos alguna maleta facturada, muchas veces nos quedamos cortos y metemos en el equipaje de mano menos de lo que deberíamos.
La maleta o mochila que llevamos en cabina no es útil solo para tener a mano lo que necesitamos durante el vuelo, sino que también nos puede salvar en caso de pérdida de la maleta facturada, por ejemplo.
Por eso, hoy le daremos un repaso a todo lo que deberías incluir en tu maleta de mano, para que, si ocurre algún percance con tu equipaje principal, puedas disfrutar de tu viaje mientras se soluciona.
Qué llevar en tu equipaje de mano
1) Documentación importante y dinero en efectivo
Independientemente de que factures alguna maleta o no, nunca deberías poner tu documentación ni el dinero en efectivo en el equipaje facturado. Ninguna maleta está libre al 100% del riesgo de extravío y, en algunos casos, nunca vuelven a aparecer.
Por tanto, lleva siempre contigo, en tu equipaje de mano, los documentos importantes y el dinero en efectivo que lleves para tu viaje.
2) Una muda de ropa
La ropa es probablemente lo más fácil de sustituir en caso de pérdida de equipaje. Sin embargo, también puede ser un quebradero de cabeza. Por ejemplo, si llegas a tu destino durante la noche, en domingo o en un día festivo en el que los comercios no abren, etc.
Además, la mayoría de las compañías aéreas solo te pagarán una indemnización si tu maleta permanece extraviada un tiempo mínimo, independientemente de que, mientras aparece, a ti te haga falta lo que llevas ella.
Normalmente se las ingenian para que aparezca justo antes de que se cumpla el plazo que les obliga a costearte los gastos derivados de la pérdida de equipaje. Por tanto, es probable que aquello que te compres por necesidad lo termines pagando de tu bolsillo.
Para evitarlo, lo mejor es meter al menos una muda completa de ropa para cambiarte y empezar a funcionar en tu viaje sin tener que salir de compras desde el primer día.
3) Aparatos tecnológicos y otras cosas delicadas
El equipaje facturado no es el mejor lugar para cosas demasiado sensibles y caras como la cámara de fotos, el disco duro, portátil, móvil…una protección inadecuada y un golpe desafortunado pueden acabar fácilmente con la pantalla o el funcionamiento general de cualquiera de esos aparatos.
Además de ser delicados, también suelen son objetos caros que, por si fuera poco, probablemente llevamos cargados de información personal y documentos importantes para nosotros. Vamos que en caso de pérdida de la maleta facturada nos podríamos llevar un buen disgusto.
Por eso, lo mejor es llevar ese tipo de aparatos con nosotros, en la cabina del avión, a salvo en nuestro equipaje de mano.
4) Neceser básico
Al igual que la muda de ropa, un neceser básico nos puede servir para mantenernos hasta que aparezca nuestra maleta extraviada sin necesidad de tener que ir corriendo a comprar nada más llegar a nuestro destino.
Aunque la mayoría de los alojamientos proveen gel y champú, no siempre es así o no siempre están muy allá. Así que meter un botecito de estos productos de higiene nunca está demás.
Además de lo anterior, conviene meter en el equipaje de mano cualquier otro producto de higiene personal o similar que puedas necesitar desde el momento en que aterrices en tu destino.
En mi caso, por ejemplo, utilizo lentillas a diario. Por tanto, en mi equipaje de mano siempre llevo mi portalentillas y un botecito de líquido que me saque del paso en caso de que me pierdan la maleta facturada durante el viaje.
*Recuerda las limitaciones respecto a los líquidos en el equipaje de mano: no más de 100 ml por bote correctamente metidos en una bolsita de plástico transparente con sistema de apertura/cierre.
5) Medicamentos importantes
Algo muy importante que no debes dejar fuera de tu equipaje de mano son algunos medicamentos.
Cualquier medicina importante que puedas necesitar desde el primer minuto, ya sea porque padeces alguna enfermedad crónica, porque sueles sufrir algún achaque con frecuencia (por ejemplo, migraña) o bien porque viajas a un país endémico para alguna enfermedad de la que debes protegerte (como, por ejemplo, la malaria) deberías incluirlo en tu equipaje de mano.
Sería bueno llevar contigo una cantidad mínima de ese medicamento que te permita pasar los primeros días, bien hasta que aparezca tu maleta extraviada o bien hasta que puedas comprar de nuevo ese medicamento.
Sin embargo, es importante tener en cuenta la disponibilidad del medicamento en cuestión en el país al que vamos a viajar. Si crees que no es fácil conseguirlo en ese destino, entonces lleva contigo, en tu equipaje de mano, toda la cantidad que puedas necesitar durante tu viaje.