Al igual que en el mundo de la gastronomía, en los viajes hay “lugares de cocción más rápida y lugares de cocción lenta”.
El Barrio Gótico de Barcelona pertenece, sin lugar a dudas, al segundo grupo; un rincón para procesar a fuego lento, un lugar perfecto para poner en práctica el slow travel.
Hoy, pasado y presente se funden en la zona más antigua de la ciudad de Barcelona, invitándonos a que nos perdamos con tranquilidad por sus calles y callejones, sus plazas y sus monumentos; deleitándonos a cada paso con su historia y su preciosa arquitectura.
La Casa de la Ciutat (Ayuntamiento), la Basílica de Santa Maria del Pi, la Catedral o las antiguas murallas y acueductos de la Barcelona romana son tan solo algunos de los numerosos puntos de interés que este barrio ofrece a sus visitantes.
En los alrededores del corazón del Barrio Gótico de Barcelona, en la Plaza Sant Jaume, se encuentra la Judería, antiguo barrio judío, con un entramado de callejuelas perfecto para pasear sin prisas. Aquí aún se conserva parte de la antigua sinagoga y muy próximo a ella encontramos un restaurante con una buena filosofía. Se trata de Allium Restaurante y su filosofía, el Slow Food.
Y, en un lugar que merece la pena visitar con calma, ¿qué mejor restaurante para comer que uno que lleva en las entrañas eso de “a fuego lento”?
Allium Restaurante y filosofía Slow Food
Sobre la filosofía de viajes slow ya hemos hablado, pero, ¿sabías que también se puede aplicar a la gastronomía?
Eso es precisamente lo que han hecho en el restaurante Allium de Barcelona, con una ubicación envidiable e idónea para quienes visitamos la ciudad, especialmente la zona del barrio gótico.
La filosofía Slow Food del Allium Restaurant aúna los sabores tradicionales, respetando los productos de temporada y teniendo muy presente la proximidad de los recursos.
Con esta filosofía, apoyan y contribuyen con la agricultura local y, a la vez, promocionan los productos y sabores de nuestra tierra; algo realmente valioso en una zona tan turística como es el barrio gótico de Barcelona.
Por otro lado, la utilización de productos de temporada nos asegura que estaremos consumiendo los alimentos en su momento óptimo; ese momento en el que te lo llevas a la boca y solo puedes decir… ¡mmmmm! ¡Puro sabor!
En este restaurante barcelonés sirven desayunos, almuerzos, cenas, tapitas, raciones… por lo que resulta conveniente para realizar un break en nuestro recorrido turístico sea cual sea la hora del día; estemos realmente hambrientos o si tan solo necesitamos un tentempié para reponer fuerzas y continuar descubriendo el barrio gótico.
En su menú nos encontramos tradición pura y, a la vez, cocina creativa. Esto a mí personalmente siempre me entusiasma porque me encanta probar cosas nuevas, pero también, y puede que incluso más, me gusta probar platos tradicionales con ese toque de creatividad que, paradójicamente, los convierten en algo original, conservando “lo de siempre”.
Otro aspecto positivo de este restaurante es que ofrece un menú variado, pudiendo elegir entre productos del mar, de la tierra, carnes, pastas… Desde unos contundentes callos con garbanzos hasta una ligera y original ensalada de quinoa real crujiente.
Ubicación y horario de Allium Restaurant
El restaurante Allium se encuentra en una ubicación privilegiada, a escasos metros de la Plaza Sant Jaume y muy próximo a la Sinagoga Mayor de Barcelona, concretamente en el Carrer del Call (número 17).
Allium Restaurant abre todos los días de la semana de 8 de la mañana a 11 de la noche.
Y tú, ¿ya lo has probado?