Viajar barato es posible, pero, ciertamente, se requiere algo de dinero. Especialmente si se trata de viajes a lugares lejanos, como por ejemplo Australia, o si estamos planeando dar la vuelta al mundo.
Sin embargo, no debemos rendirnos y pensar que es imposible costearnos ese viaje de nuestros sueños. Tan sólo hemos de ahorrar para viajar, ser constantes y pacientes hasta alcanzar nuestra meta.
Para ello, tenemos que planificar nuestro viaje adecuadamente y con antelación suficiente para poder acumular el dinerillo que nos haga falta, poner en marcha estrategias de ahorro que nos permitan conseguir nuestro objetivo y ajustar nuestro presupuesto a nuestras posibilidades reales.
Si quieres ahorrar para viajar, a continuación te dejo 4 estrategias que puedes poner en marcha desde ya.
Ahorrar para viajar: 4 estrategias eficaces
Abrir una cuenta de ahorro específica para nuestro objetivo
Mantener el dinero que estamos ahorrando para viajar separado del dinero que tenemos para nuestro día a día es importante.
Muchas veces los gastos cotidianos se nos van de las manos por diversas razones evitables, o somos demasiado flexibles con nosotros mismos y nuestras cuentas. Para evitarlo, una de las mejores estrategias es abrir una cuenta especifica en la que ahorrar para viajar.

Separando un dinero mensual en dicha cuenta evitaremos tocar ese dinero, aunque seamos demasiado flexibles con nuestros gastos habituales.
La estrategia a la antigua usanza sería la típica hucha en la que ir echando esas monedillas que nos sobran a diario en la cartera. Sin embargo, esta técnica es válida solo para aquellos que realmente se comprometen a no echar mano de la hucha: ni para coger cambio, comprar el pan, pagarle al pizzero, ni para nada de nada.
Podemos complementar ambas opciones: una cuenta en la que ingresar una cantidad fija mensual (por ejemplo 50, 100 o 200 euros, lo que te puedas permitir) y la hucha para echar todas las monedas pequeñas que nos sobren al final del día o la semana.
Deshazte de todo lo que no necesitas
La reciente llegada de Wallapop, abre un sector estable y sencillo para deshacernos de todo lo que no utilizamos.

Aunque ya existían plataformas de compra-venta, como eBay o Segunda Mano, la aplicación de moda ha conseguido que quitarnos de encima lo que ya no necesitamos sea mucho más fácil.
Échale un ojo a todo lo que tienes acumulado y que hace siglos que no tocas o no te pones e imagina que lo vendes todo a un euro. Te sorprenderías a cuánto asciende al monto final, y eso que seguro que tienes cosillas que valen mucho más que un solo euro.
Así que, si quieres ahorrar para viajar, ten en cuenta que una de las mayores fuentes de dinero para conseguir tu objetivo probablemente esté en tu trastero. Además de Wallapop, puedes revenderlas por cualquiera de estas otras vías.
Reduce tus gastos y podrás ahorrar para viajar
Todos podemos reducir nuestros gastos de una forma u otra. No es necesario encerrarnos en una cueva y rehuir de todos los planes que conlleven alguna inversión de dinero.
Basta con ser conscientes de cuáles son las actividades en las que podemos recortar gastos, y o bien reducirlas o sustituirlas por alternativas más baratas o gratuitas, al menos de vez en cuando.
Puede que a priori no te suponga un gran ahorro, pero a medio-largo plazo te aseguro que verás cómo los ahorros para viajar van creciendo.
Algunas de las actividades en las que es fácil reducir gastos y obtener resultados significativos son: comer en restaurantes/pedir comida a domicilio, las copas en las noches de fiesta, la cesta de la compra, etc.
También es interesante revisar nuestros gastos fijos como internet, teléfono móvil o mantenimiento de tarjetas y cuentas bancarias, e investigar si existen alternativas más económicas.
Del mismo modo, suele ser conveniente analizar si realmente le sacamos partido a suscripciones de pago como Netflix, cuentas premium de Spotify o Amazon, etc. Si no las utilizas lo suficiente o puedes prescindir de ellas, cancela la suscripción y utiliza ese dinero en ahorrar para viajar. Si las utilizas a menudo pero tienes demasiadas cuentas de pago, quizás deberías hacer de tripas corazón y quedarte solo con aquella que más utilices.
Aumenta tus ganancias

Además de ahorrar para viajar a partir de tu salario mensual, puedes aumentar tus ganancias para conseguir tu meta más rápidamente.
Puedes buscar algún trabajillo a media jornada para complementar tu actividad laboral actual, echar algunas horas extra en tu empleo, dedicar algunos fines de semana en trabajos puntuales o hacer trabajos como freelance en tus ratos libres.
Esto nos supone un esfuerzo extra, pero se trataría de una medida temporal. Ni si quiera tiene por qué ser algo continuado y constante a lo largo del tiempo, sino que puede ser algo esporádico, haciendo trabajos extra de vez en cuando para conseguir nuestra meta de ahorro más rápidamente o con más facilidad.
Ponte metas realistas para no perder la motivación
Para acabar, algo que me parece muy importante: ponerse metas realistas. Partas de cero o de una cantidad de dinerillo que ya tienes ahorrado, se siempre realista.
Echa cuentas de cuánto dinero al mes puedes ahorrar con seguridad de tu salario y utilizando las técnicas que te he contado más arriba. No seas demasiado positivo, todo lo contrario, te recomiendo que lo calcules a la baja, poniéndote en la peor de las situaciones.
Si somos demasiado exigentes, cualquier imprevisto puede hacer que un mes no podamos ahorrar la cantidad que nos habíamos puesto como objetivo. Como consecuencia, puede que nos desmotivemos pensando que es imposible ahorrar todo el dinero que necesitamos para nuestro viaje en el plazo que nos habíamos propuesto. Y esto puede hacer que desistamos.
Para evitarlo, es mejor ponerse una meta realista e, incluso, humilde; aunque ello conlleve que tengamos que dedicar más tiempo a ahorrar para viajar.
De esta forma, además, será más fácil rebasar nuestra meta mensual o semanal y, así, los meses en los que podamos ahorrar algo más de lo previsto nos dará un subidón que ayudará a que sigamos por el buen camino. Incluso, puede finalmente consigamos nuestro objetivo antes del plazo que hayamos establecido casi sin darnos cuenta.