Reikiavik, además de ser la capital del país, es con diferencia el núcleo urbano más poblado de Islandia.
No obstante, a pesar de congregar a la mayor parte de la población, no es una ciudad demasiado grande ni está para nada masificada. De hecho, el número de habitantes de esta ciudad no alcanza los 125000, por lo que podríamos decir que es una ciudad bastante pequeña, sobre todo si la comparamos con las principales ciudades españolas, por ejemplo.
Pero que sea relativamente pequeña no significa que a la hora de plantearnos qué hacer en Reikiavik o qué ver en la ciudad nos vayamos a quedar sin opciones.
De hecho, para lo “pequeña” que es hay multitud de lugares interesantes que visitar y, por ejemplo, llama la atención el gran número de museos que alberga la ciudad.
A continuación te cuento alguna de las muchas cosas que puedes ver y hacer en la capital islandesa.
Qué hacer en Reikiavik: la ciudad, sus museos y algunos planes alternativos

Descubrir el centro de la ciudad a pie
Una de las cosas que más te recomiendo hacer en Reikiavik es recorrer las calles del centro de la ciudad a pie. Así podrás contemplar sus características edificaciones, que son generalmente coloridas casitas con tejados a dos aguas y fachadas revestidas de una especie de placas metálicas que le dan un aire marinero muy peculiar.
Paseando por las calles de Reikiavik podrás contemplar además numerosas obras de Street Art; sin buscar mucho, y donde menos te lo esperes, verás verdaderas obras de arte callejero.

Además, la capital de Islandia alberga numerosas tiendecitas, bares y restaurantes dignos de admirar.
Algunos de esos comercios destacan por su originalidad y otros, sobre todo algunas cafeterías y restaurantes, porque parecen sacados de revistas de decoración de lo bonitos y elegantes que son.
Paseando por la calle comercial de Laugavegur, una de las arterias principales de la ciudad, podrás ver muchas de esas tiendas y comercios, así como empaparte del estilo de vida de los islandeses en la capital del país.
Recorriendo el centro de Reikiavik a pie también podrás contemplar los edificios emblemáticos, entre los que destaca la Hallgrímskirkja, un edificio inconfundible, e icónico de la ciudad, por su llamativa construcción.
Aunque mucha gente se refiere a la Hallgrímskirkja como la “Catedral de Reikiavik”, lo cierto es que esta edificación no es una catedral, sino una iglesia; concretamente una iglesia luterana.
La ciudad cuenta con dos catedrales, hasta las que también puedes llegar paseando; una es católica, la Basilíka Krists konungs (Catedral de Cristo Rey de Reikiavik), y otra luterana, la Dómkirkjan í Reykjavík (Catedral de Reikiavik).


A la izquierda la famosa Hallgrímskirkja; a la derecha la catedral católica de Reikiavik
Museos y exhibiciones de Reikiavik
En la ciudad, tanto en el centro como a las afueras, encontrarás numerosos museos, galerías y exhibiciones que visitar, tantas que, a menos que dispongas de muchísimo tiempo, tendrás que hacer una selección y quedarte con los que más te interesen. Algunos de esos museos son:
The Settlement Exhibition Reykjavík 871±2
Este es uno de los museos más importantes de la ciudad, que se encuentra, además, emplazado en el yacimiento de una de las primeras casas que se erigieron en Reikiavik. En él se pueden contemplar diferentes hallazgos arqueológicos de los primeros habitantes de Reikiavik acompañado de material audiovisual.
La Faloteca Nacional de Islandia
Tal y como su nombre indica, éste es un museo de falos, tal cual. En su interior alberga casi 300 penes de diferentes especies animales, incluyendo ejemplares humanos.
Whales of Iceland
La exhibición Whales of Iceland adentra a los visitantes en el interesante mundo de las ballenas y los delfines. Además de maquetas a tamaño real de numerosas especies de estos animales marinos, también encontramos esqueletos y otros elementos, como barbas de ballenas, acompañados de diferentes paneles informativos y recursos audiovisuales.

Museo Nacional de Islandia
Este museo nos adentra en la historia del país, desde los asentamientos vikingos hasta la mitad del siglo XX. En su interior podemos contemplar una amplia colección de utensilios, mobiliario y restos arqueológicos, entre otros.
Saga Museum
No muy lejos del Harpa, del que hablaremos más abajo, se encuentra el “Museo de las Sagas”, en el que se recrean los momentos clave de la historia de Islandia a través de figuras creadas según las descripciones de las crónicas y las sagas islandesas.

Museo Perlan
Más alejado del centro, concretamente en la colina de Öskjuhlid, el museo Perlan acoge diferentes exposiciones en su interior.
Actualmente alberga una exposición permanente sobre los glaciares y las cuevas de hielo, llamada Wonders of Iceland; y en mayo de 2018 se estrenará una exhibición sobre la naturaleza islandesa llamada Land, Coast, Ocean.
También durante 2018, probablemente en otoño, se pondrá en funcionamiento un planetario que promete una experiencia envolvente con imágenes y sonido de alta calidad en una cúpula de 360 grados.
Pero además de las exposiciones, el Museo Perlan destaca por su enorme cúpula, que cuenta con un mirador desde donde se puede contemplar toda la ciudad.
Recorrido junto al mar con unas vistas espectaculares
Más allá del centro de la ciudad, otro recorrido a pie que deberías incluir en tu lista sobre qué hacer en Reikiavik es el del Sculpture & Shore Walk.
Ésta viene a ser una avenida marítima que recorre la costa de la ciudad y desde la cual es posible disfrutar, en los días despejados, de unas vistas espectaculares del fiordo Kollafjörður, con las islas de Engey y Viðey, y la montaña de Esja al fondo.
Pero además de las vistas, en este paseo podrás contemplar, por ejemplo, el moderno y llamativo Harpa, un centro de congresos y conferencias, y la escultura del Viajero del Sol.

Qué hacer en Reikiavik más allá de las visitas culturales y los paseos por la ciudad
Comer el mejor perrito caliente del mundo
Algunos dicen que en Reikiavik se pueden comer los mejores perritos calientes del mundo, otros, más modestos, se conforman con decir que podemos probar los mejores de Islandia; pero en todos los casos se refieren concretamente a un modesto puesto llamado Bæjarins Beztu Pylsur, nombre que significa “el mejor de la ciudad”.

Dada su fama, no es raro encontrar frente a su ventanilla una cola de gente esperando su perrito caliente, que cuesta 400 coronas.
Personalmente, me cuesta decir si es el mejor perrito caliente que he comido nunca, aunque está bueno, no lo voy a negar. En cualquier caso, por tradición y precio, merece la pena probarlo.
Se encuentra cerca del puerto de Reikiavik, por lo que es un buen plan para combinar con un paseo por la avenida marítima de la ciudad.
Un chapuzón en Reikiavik
En Reikiavik hay numerosas piscinas públicas, bastante más económicas que la famosa Blue Lagoon, en las que podrás darte un chapuzón sin pasar frío incluso durante el invierno. Además, en Reikiavik también encontrarás la playa geotérmica de Nauthólsvík, aunque ésta quizás es mejor reservarla para la época estival, cuando la temperatura del agua alcanza los 18-20ºC.
Avistamiento de ballenas
Otra actividad muy molona que puedes hacer desde Reikiavik es salir a observar ballenas. Los barcos salen desde el puerto de la ciudad y realizan excursiones durante todo el año, aunque por probabilidad de avistamiento y por comodidad, el invierno no es la mejor época.
Y tú, ¿ya has estado en Islandia? ¿Has visitado Reikiavik? ¿Todavía está en tu lista de destinos pendientes? ¡Exprésate en los comentarios!
Os adrezco el compartir con todos nosotros toda esta interesante información. Con estos granitos de arena hacemos más grande la montaña Internet. Enhorabuena por este post.
Saludos
¡Muchísimas gracias por tu comentario! Me alegra mucho que te haya gustado el post. Un saludo!