Comparado con muchos otros charcos y piscinas naturales de Gran Canaria, el Charco de San Lorenzo, es menos conocido y muy poco turístico.
Se trata de un rinconcito muy agradable para disfrutar del mar y el sol, así como de la tranquilidad en un ambiente local.
No hay que confundirlo con las Charcas de San Lorenzo. Como decía este charco no es tan conocido como debiera, y me ha pasado varias veces que al hablar de él me han dicho «¡Querrás decir la Charca de San Lorenzo!».
Pero no, una cosa es el charco o piscina natural de la que hablaremos aquí, y otra muy distinta son las Charcas de San Lorenzo que se encuentran en el distrito Tamaraceite-San Lorenzo-Tenoya.
Así que, si quieres ir más allá de los lugares turísticos más famosos de la isla o quieres conocer más a fondo los charcos de Gran Canaria, ¡sigue leyendo!
El Charco de San Lorenzo

Atardecer junto al Charco de San Lorenzo
Aunque su nombre pueda llevar a confusión, el Charco de San Lorenzo no es un único charco, sino que consiste en dos piscinas muy cómodas y con buen acceso.
Nos referimos a ellas como piscinas naturales porque originalmente y hasta cierto punto lo son, pero, como apreciarás si visitas el lugar, en este caso la mano del hombre ha intervenido para acondicionarlas. De hecho fueron rehabilitadas recientemente (a principios de 2021).
Así, estas piscinas están totalmente preparadas para disfrutar del mar no solo con comodidad, sino también, y más importante aún, sin correr riesgos por la corriente ni el oleaje, que puede ser bastante potente en esta zona de la isla.
Ubicación y características del Charco de San Lorenzo
El Charco de San Lorenzo se encuentra en el municipio de Moya, en el norte de Gran Canaria, muy cerquita del barrio marinero de El Roque.
Las dos piscinas naturales que lo componen se nutren del mar, que renueva su agua constantemente, y tienen un tamaño considerable. La de mayor tamaño alcanza los 75 metros de largo y 45 de ancho, y cuenta con bastante profundidad.

El Charco de San Lorenzo

Vistas del barrio de El Roque desde la zona del Charco de San Lorenzo
Aunque el Charco de San Lorenzo está rodeado de roca volcánica, que lo delimita y aísla del mar, y su suelo es mayoritariamente rocoso, también cuenta con una zona de arena. Sin embargo, puede que solamente la veas desde fuera si visitas estas piscinas naturales mientras haya marea baja.
Precisamente es con la bajamar cuando se recomienda el baño, en su momento de esplendor.
No obstante, puedes disfrutar de estas piscinas cuando quieras. Eso sí, siempre con la precaución de no ponerte en la zona donde rompen las olas en el caso de que el oleaje sea fuerte, cosa habitual en esta zona del litoral de Gran Canaria, como ya dije.

Imagen de Hola Islas Canarias
Además, te resultará muy útil llevarte escarpines o, como decimos en Gran Canaria, «unas cholas de calamar o unas calamares».
En general, toda la costa norte de la isla, con multitud de charcos y áreas rocosas, se disfruta más con este tipo de «calzado acuático». Puedes bañarte sin ellas, pero ¡las rocas pinchan y duelen!; así que es mejor incluirlas en tu mochila.
Volviendo a lo que nos concierne, aunque el Charco de San Lorenzo se encuentra en lo que se definiría como un entorno urbano, es un lugar muy tranquilito, y en determinados momentos del día, sobre todo entre semana, puedes disfrutar de él casi en exclusiva.
Por ejemplo, al final de la tarde, que en días de calor aún puede ser muy apetecible pegarse un baño, yo me he encontrado estas piscinas naturales totalmente vacías.
Por si poder disfrutar de la tranquilidad en el Charco de San Lorenzo fuera poco, desde él se ven atardeceres muy bonitos.
¿Qué servicios encontrarás en estas piscinas naturales del norte de Gran Canaria?
Las piscinas que componen el Charco de San Lorenzo cuentan con una escalinata con barandilla para acceder al agua con facilidad y están bordeadas por un corto y colorido paseo.
Además, el lugar dispone de baños, duchas y una zona de aparcamiento bastante generosa.
Más allá de un edificio donde se encuentra el restaurante local El Paso y un bar tipo chiringuito al final del paseo, no hay grandes construcciones en el entorno del charco.
No obstante, a pocos metros se encuentra el parking de autocaravanas de San Felipe (Camping El Pagador), por lo que podría ser una opción de alojamiento si estás explorando Gran Canaria en autocaravana y quieres pasar alguna noche cerca de estas piscinas.

El colorido paseo que bordea estas piscinas naturales del norte de Gran Canaria
A pesar de los servicios de los que dispone, el Charco de San Lorenzo conserva bastante su esencia y su aire natural.
Como ya mencioné, no es un lugar turístico y, tal vez por eso, las instalaciones para ofrecer todos esos servicios, no son descabelladas.
Es decir, no revientan ni ocupan todo el entorno hasta hacernos sentir que estamos en un resort; algo que personalmente me gusta mucho.
Cómo llegar al Charco de San Lorenzo en Moya
En coche
El acceso en coche a la ubicación estas piscinas es realmente sencillo y cómodo, ya que se encuentran junto a la autovía.
Concretamente el Charco de San Lorenzo está junto a la Autovía del Norte o GC-2, que une la capital con el norte de la isla. Por tanto, si visitas estas piscinas naturales desde Las Palmas de Gran Canaria tendrás que tomar la GC-2 en dirección Guía/Gáldar/Agaete.
Siguiendo esta autopista bordearás el litoral del norte de Gran Canaria hasta llegar a El Pagador, donde tendrás que incorporarte a la GC-75, salir por la primera salida de la rotonda que te vas a encontrar en seguida y tras unos poquísimos metros por el Camino de San Lorenzo llegarás a tu destino.
¡Es súper sencillo!
En transporte público
Aunque la forma más fácil y rápida de llegar hasta el Charco de San Lorenzo es en coche, también es posible ir en guagua (o autobús para los no autóctonos ;)).
Desde la capital tendrías coger una de las guaguas de Global (las azules, no las amarillas que son las Guaguas Municipales) para ir en dirección a Gáldar.
Las líneas que más te convendrán, por su proximidad a las piscinas, son aquellas que pasen por la parada La Charca, en El Pagador. Dos líneas que paran ahí son la 213 (Arucas - Trapiche - San Felipe) y la 215 (Teror - Arucas - San Felipe).
Sin embargo, tal vez te puede servir alguna línea que pare en el Cruce de San Felipe (en El Pagador también).
Como el mayor contra de ir en transporte público hasta el Charco de San Lorenzo es la frecuencia de guaguas que te dejen por la zona, mi recomendación es que, antes de ir, te acerques a alguna estación de guaguas en la capital (por ejemplo, en el Parque San Telmo) y preguntes.
Allí te informarán mejor sobre los horarios y las opciones disponibles (por ejemplo, si vas un día festivo seguramente tendrás menos opciones de horario) para el día concreto en el que quieras ir a estas piscinas naturales.
En cualquier caso, siempre puedes consultar la web de Guaguas Global para más información.
¿Qué te ha parecido este rinconcito para refrescarte en el norte de Gran Canaria? ¿Lo conocías?
¡Exprésate en los comentarios!